La prensa comprobó la contaminación de Chevron en Aguarico.
Shushufindi (Sucumbíos).- Esta mañana, siete comunicadores sociales palparon, observaron y percibieron la contaminación dejada por la transnacional petrolera Chevron-Texaco, en la Amazonía. Todos coincidieron en señalar que los daños dejados por la petrolera estadounidense están allí.
Los periodistas Thalía Flores (Diario Hoy), Rosalía Arteaga (articulista de diario La Hora), Miguel Rivadeneira (Ecuadoradio/Radio Quito), Gonzalo Rosero (Radio Democracia), Omar Ospina (Editorialista), Kléber Mantilla (La Hora) y César Coronel (diario Hoy) aceptaron la invitación de la Secretaría de Comunicación para verificar el deterioro ambiental que aún persiste en los alrededores del Pozo Aguarico 4, ubicado en Shushufindi, en Sucumbíos.
La invitación se cursó a 39 periodistas, editorialistas y generadores de opinión pública para que sean testigos de los daños, pero solamente siete aceptaron la iniciativa.
A las 10:30, la comitiva de comunicadores llegó hasta las inmediaciones del pozo. Allí pudieron comprobar que aún existe una piscina de desechos que está a la intemperie y que ha condenado a la muerte a personas y animales.
Esta vorágine de contaminación ha permanecido así durante 30 años, desde que Chevron-Texaco dejó de operar en el país.
Arteaga, Flores, Mantilla y Coronel decidieron hundir su mano para palpar esa sustancia aceitosa que se mezcla con la vegetación. Todos pudieron mirar que los guantes quedaban manchados de negro-petróleo y percibir el olor a combustible que impregnaba el lugar.
Los siete comunicadores coincidieron en señalar que la contaminación es evidente. Por ejemplo, el rafiodifusor Gonzalo Rosero, aseguró que no puede negar el daño.
Justamente luego de que en su programa Herny Llanes y Carlos Pareja dijeran que se montó una farsa sobre la contaminación en el Aguarico, nació la idea de la visita de periodistas a la zona.
Nathaly Roxanna Palma Guevara.